Difundimos un comunicado de los profesionales de la salud de la CBA

ANTE LA DISCRIMINACIÓN Y EL ABUSO DE PODER,
DEMOCRATICEMOS LA SALUD DE LA CIUDAD 

Los profesionales de la salud de la Ciudad, estamos viviendo una profunda injusticia y, ante eso, reaccionamos. Se trata, en éste caso, de profesionales que desde hace muchos años vienen ejerciendo funciones de alta responsabilidad institucional, y sin cobrar suplemento alguno por ejercer esas funciones.

Estamos hablando de coordinar el Programa de salud escolar, o dirigir Centros de Salud y Acción Comunitaria. Muchos de estos profesionales se formaron durante muchos años en cursos de 600 horas y más, en gestión y administración de servicios de salud al igual que los médicos. Y ahora que, por fin, después de tantos años, se llama a concurso para cubrir esos cargos, para el Ministro de Salud, no están habilitados para concursar.

Sí, como lo lee. Se trata de todos los profesionales incluidos en la Ordenanza Nº 41.455 de la Carrera Profesional Hospitalaria: Odontólogos, Obstétricas, Bioquímicos, farmacéuticos, psicólogos, psicopedagogos, Sociólogos, Antropólogos, Musicoterapeutas, Terapistas Ocupacionales, Kinesiólogos, Nutricionistas, Trabajadores Sociales, entre otras disciplinas.

Durante diez, quince, y hasta veinte años, pudieron hacerlo, y muy bien. Nunca hubo una queja, ni una sanción. Todos los Ministros de Salud de la Ciudad consintieron que hicieran esas tareas. También, por supuesto, el actual Ministro.

Pero, a la hora de concursar:


Claro que el artículo 10 del régimen de concursos, le indica a la autoridad que defina de qué profesiones se trata. Pero, se sobreentiende que dentro de la lógica y de acuerdo a las Leyes. No lo habilita para cualquier arbitrariedad, cual si estuviéramos en pleno absolutismo.
Además de ser una gran injusticia para quienes vienen ejerciendo esas funciones, es un ridículo y sorprendente atraso conceptual en una ciudad que se caracteriza -en el marco del país y de América Latina- por ser pionera y ejemplo en materia de su desarrollo humano, político y participativo.
Pero cuando se rompe el contrato social, cuando se dejan de lado los valores en función de algún supremo poder, la sociedad entra en un panorama oscuro e incierto. Ante eso, buscan justicia en la Justicia, ya que no la encuentran en el Ministerio de Salud.
Varios Jueces ya han dado lugar a pedidos de amparo.
Esta causa recién se inicia, y la acompañaremos hasta el fin, por nuestros derechos, y por los de todos nuestros compañeros. Sentimos la democracia como un derecho y como un deber, por eso nos oponemos a todo abuso de poder.
Se hace impostergable democratizar el Sistema de Salud de la Ciudad para ampliar los márgenes de participación de todos.


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